Hace parte de las ciencias de la tierra. La climatología estudia los fenómenos del clima, estableciendo su comportamiento por zonas, de acuerdo a las variaciones que se han presentado en el tiempo, es decir, basado en lo ocurrido en el pasado, se conoce lo que ocurre en el presente y se prevé lo que sucederá en el futuro, respecto al clima.
La climatología tiende a ser confundida con la meteorología (ciencia que estudia el tiempo atmosférico), porque ambas utilizan los mismos parámetros de evaluación, pero la diferencia está en que la meteorología realiza previsiones a corto plazo o de manera inmediata, mientras que la finalidad de la climatología está en el estudio y previsiones del comportamiento del clima a futuro o largo plazo.
Su importancia ha ido incrementándose con el pasar de los tiempos. Pues desde un punto de vista económico, la estructura del comportamiento del clima en una región u otra (que esta ciencia puede definir) contribuye con el desenvolvimiento de las actividades productivas.
La climatología está relacionada prácticamente con todas las ciencias que hacen parte de la cotidianidad del ser humano de hoy, aquellas como la Ingeniería o la arquitectura, que implican la interacción del hombre con la naturaleza y las alteraciones que produce.
También, desde una perspectiva gubernamental, los estudios climatológicos ayudarán con la planificación anual y la toma de previsiones necesarias para mantener la calidad de vida de sus ciudadanos. Ejemplo de ello puede ser en países que poseen épocas de sequía, que afectan la producción hidroeléctrica y de muchas otras industrias, donde con antelación pueden hacerle frente a la situación sin crear afección alguna.
Por otro lado, la palabra climatología puede ser utilizada como sustantivo para definir las condiciones atmosféricas (comportamiento) de un clima. Por ejemplo: “la climatología andina no es igual a la del centro del país” o “la climatología en esta región no es óptima para nuestro estilo de vida”.
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