
Se encarga, también, de separar a los mares y los océanos de los lagos, ríos y cuencas, es decir, las aguas saladas de las dulces, las cuales sólo alcanzan el 6% de la totalidad de las aguas que se encuentran en la superficie terrestre. Igualmente, estudia los ecosistemas de los cuerpos de agua dulce.
La hidrología, por su parte, es una de las ciencias más próximas a la hidrografía, pues se encarga del estudio de las aguas continentales y marítimas, enfocándose en sus componentes químicos, su ubicación y los beneficios que le traen a la población. Ambas áreas de estudios se complementan mutuamente; la hidrografía necesita de la hidrología para tener información sobre los componentes de las aguas que se estudian, su ubicación y ecosistemas, pudiendo así ampliar la investigación y especializarse en lo que sería la ubicación geográfica del lugar.

0 Comentarios